¡Qué país, Miquelarena, que país!

Qué país, Miquelarena, que país!

En muchas ocasiones escuché a Jesús Hermida la frase que da título a este artículo, la utilizaba, cuando salía a la luz alguna noticia peculiar, de marcado carácter y comportamiento español, normalmente asunto político. Ahora y tal como tenemos el patio de la política nacional, no está de más recordar lo que  motivó aquella frase, y  es lo siguiente:

 

Jacinto Miquelarena fue un periodista deportivo de Bilbao fundador del diario Excélsior que acabó en el ABC tras ser el primer director de Radio Nacional de España. Su amigo Mourlane Michelena despedía a su amigo Jacinto en la estación y ese fue el marco de la frase que encabeza el artículo y que ha quedado como expresión emblemática de lo que es España.

 

La escena en cuestión fue la siguiente. Mourlane y Miquelarena estaban entretenidos en su conversación cuando se asomó un coronel por una de las ventanillas del tren, ordenando a uno de sus soldados: “Corre a la cantina y que te den una guindilla picante”. El soldado salió corriendo y de pronto, se escuchó la  voz del coronel que vociferaba: “Y que pique mucho, que si no, te la voy a meter por el trasero”. 

 

El imperativo diálogo sorprendió a los presentes. Pedro Mourlane, tras esto, levantó su majestuosa cabeza, miró a su amigo y exclamó: “¡Qué país, Miquelarena, que país!”, (blog de Iñaki Anasagasti)

 

En estos días que nuestros políticos están preocupados por sus Aforamientos y Planes de Pensiones como eurodiputados y, comparándolo con aquel tiempo en que al coronel le preocupaba que el soldado le trajera una guindilla muy picante,  hoy a nuestros políticos les preocupa seguir aforados, y que las instituciones soportadas con dinero público, mantengan sus privilegios, estableciendo diferencias judiciales (aforamientos) con el resto de los ciudadanos, aunque se les llene la boca de decir que todos somos iguales ante la ley.

 

Sobre las explicaciones que han dado respecto a los Planes de Pensiones de los eurodiputados, uno no sale del asombro de que personas nos representan,  dicen  desconocer su funcionamiento, uno dimite “por coherencia”, la que fue consejera de comunidad autónoma, ni aclara, ni se aclara , o sea que tampoco sabía nada, el exministro tampoco sabía nada etc., seguiremos buscando la coherencia de WILLY…….., mientras una dice que devolverá el dinero, todo un esperpento, con el dinero de todos, pobrecitos ignorantes……….

 

Pero todos estos son los que deciden si nos recortan las pensiones o nos alargan la edad de jubilación cuando ellos cobrarán dos pensiones que con una legislatura las tienen garantizadas. Si tuvieran un poquito de decencia política, dignidad, ética y coherencia, se otorgarían los mismos derechos que al ciudadano normal.

 

También nos hablan de regeneración democrática, ¿para quién?, el ciudadano español, se comporta y participa democráticamente, quien se tiene que regenerar es quien se ha degenerado en sus hábitos, escudándose en la democracia, o quién no lo ha practicado nunca.

 

Por otra parte, llama la atención que se reconozca la ilegalidad de ciertas aplicaciones informáticas respecto al transporte y se las enmarque dentro de la llamada economía colaborativa, pero, si es cierto que los ingresos que generan acaban en paraísos fiscales, sin soportar las cargas fiscales y costes laborales correspondientes ¿qué tienen de colaborativas? Es incompresible la pasividad de las distintas administraciones.

 

Paraísos fiscales: las empresas del IBEX tienen 467 filiales en estos destinos, un 32% más que hace dos años, y 71% más que en 2009. El estudio critica la falta de transparencia de la mayoría de nuestras grandes empresas: solo tres informan sobre las donaciones a instituciones y partidos políticos (Emprendedores nº 202). Años de crisis, en que los partidos políticos, con un discurso de crisis y recortes para el ciudadano, y otro de aforamientos y privilegios para ellos, mientras reciben donaciones de las grandes empresas. ¿Serán capaces de regenerarse?