Miles de pacientes afectados ante la falta de transporte en su asistencia sanitaria a domicilio

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Ni el taxi no los vehículos de alquiler con conductor se han presentado al concurso para el traslado del personal sanitario para la atención sanitaria a domicilio que ha quedado desierto.  Esta situación deja en jaque un servicio fundamental para la sanidad madrileña como es la asistencia domiciliaria. De acuerdo con un documento del Observatorio de Resultados del Servicio Madrileño de Salud, en 2024 las “Unidades de Atención Domiciliaria Médica” atendieron 71.994 pacientes y las “Unidades de Atención Domiciliaria de Enfermería” atendieron 21.056 pacientes en Madrid.

El servicio, que hasta ahora cubría  la empresa de VTC Auro, ya había sido objeto de numerosas quejas por parte de los propios sanitarios. Según recoge El País, “los retrasos y cancelaciones de los conductores” eran constantes, lo que obligaba a médicos y enfermeras a reorganizar su jornada sobre la marcha.

Varios profesionales explicaron al medio que en muchas ocasiones los servicios eran cancelados con apenas 15 minutos de antelación, dejándoles completamente "vendidos" y sin posibilidad de conseguir otro transporte.  Ante la ausencia de un servicio fiable, muchos profesionales optan por desplazarse en su propio vehículo.

Un problema que afecta a la calidad asistencial

El propio pliego del contrato reconoce que la existencia de un sistema de movilidad fiable es “vital” para el correcto funcionamiento del servicio. Sin embargo, los últimos años han estado marcados por quejas hacia la actual empresa adjudicataria, no solo por las cancelaciones, sino también por los retrasos que tienen incluso consecuencias clínicas, afectando a las muestras de sangre extraídas en el domicilio que no llegan a tiempo al centro de salud. 

 

El sindicato CSIF ha denunciado que el servicio prestado por Auro “apenas cubre las necesidades del personal”. Además, considera que el nuevo concurso, valorado en 5,6 millones de euros para tres años y que ha quedado desierto, “es una muestra del fracaso de un sistema que nunca ha funcionado”.