“Aguantan porque están cansados de que se quiera acabar con su vida”

“Está siendo muy duro, tanto físicamente com o mentalmente, pero no quieren dejarlo”. Tito Álvarez, portavoz de la Asociación Élite de Barcelona que se encuentra en estos momentos en París, resume así la situación de sus compañeros franceses tras 24 horas de huelga. Un paro que de momento es indefinido.

Desde primera hora de la mañana los taxistas mantienen las protestas en la capital francesa. Denuncian que el Gobierno francés no ha cumplido con sus promesas de no liberalizar al sector de la VTCs y temen por la viabilidad de su trabajo. Algunos taxistas españoles han decidido quedarse hasta que se resuelva el conflicto porque aseguran que “si París y Francia caen, caeremos todos”.

“Es verdad que la normativa española no es tan liberalizadora como la francesa, pero la fuerza que tienen estas empresas pueden provocar un cambio en nuestra contra”. Por eso aguantan, explica el portavoz de Élite Barcelona, “porque aunque están cansados, están más cansados de que se quiera acabar con su vida”.

Álvarez, que viajó el pasado lunes para participar en las protestas junto con un centenar de compañeros de diferentes ciudades españolas, ha destacado la solidaridad de los compañeros franceses. “Es increíble ver cómo se ayudan, y nos ayudan, unos a otros, nos dan comida gratis, nos ofrecen sus casas. No hay palabras”.

Nueva jornada de protestas

Desde primera hora de la mañana de hoy miércoles, a los taxistas de París se les han sumado compañeros de otras ciudades como Lille, Niza, Marsella o Touluse que han ralentizado el tráfico en los principales accesos a la capital gala.

Además, continúan sin servicio de taxi las principales estaciones de tren y hay bloqueos en los aeropuertos de Orly y Roissy. Si bien es cierto que la tensión vivida durante la jornada de ayer parece haber remitido, en la que se registraron incidentes violentos y se detuvieron a una veintena de personas, para hoy se espera una nueva jornada complicada en la capital.